La pistola de pulverización es una herramienta de precisión que permite obtener resultados óptimos con un menor gasto. Sin embargo, para asegurarnos de que estos equipos funcionen durante un largo periodo de tiempo, sin requerir reparación, deben ser limpiados después de cada uso, y al final de cada jornada de trabajo.
¿Cómo limpiar la pistola de pulverización?
-
Agua o disolvente.
Sin importar el tipo de pintura que se haya utilizado en la labor, el procedimiento de limpieza debe ser el mismo. Lo único que cambia, teniendo en cuenta la composición de la pintura, es el tipo de disolvente a usar. En pinturas a base de agua, utilizaremos una mescla de agua y detergente, en tanto que en pinturas a base de aceite, utilizaremos disolventes especiales. Algunos de estos disolventes son inflamables, razón por la cual es preciso observar las debidas precauciones.
-
Los elementos de limpieza.
Para hacer la limpieza de la pistola de pulverización se necesitara: Un par de paños, cepillos, agua o disolvente, un recipiente para la eliminación de los productos usados y en algunos casos, una llave para desarmar algunas partes. Es recomendable no utilizar objetos duros, puntiagudos o afilados, que puedan dañar la pistola.
-
Leer el manual de instrucciones.
Leer las instrucciones y consultar las recomendaciones del fabricante, en lo que se refiere específicamente a la limpieza del sistema es fundamental. No olvidemos que algunos fabricantes, recomiendan que algunas partes de la pistola de pulverización, deben ser limpiados por ultrasonido.
-
Limpiando la pistola.
Retiremos el recipiente de pintura y vaciémoslo por completo. Limpiemos el depósito y el tubo de alimentación con la ayuda de un cepillo y agua o disolvente. Coloquemos el líquido que hemos preparado para la limpieza en el recipiente de pintura. Agitamos fuertemente y lo vaciamos. Repetimos la operación hasta que el líquido salga limpio. Los residuos, en la boquilla, el regulador y en el exterior de la pistola, se deben retirar con un cepillo humedecido en el mismo líquido de limpieza que hemos preparado.
-
Secado y lubricación.
El final del proceso es el secado de todas las partes. Con el fin de evitar la corrosión de las partes metálicas. Los componentes articulados deben ser lubricados con un producto específico que no contenga sustancias ácidas. La lubricación garantiza la protección y el buen funcionamiento de la pistola de pulverización.
Si estos temas son de su interés, por favor haga sus comentarios, pinchando aquí.